En algunas otras entradas anteriores de nuestro blog, os hemos hablado de cómo con unos gorros oncológicos básicos y aprovechando bien los complementos, podemos conseguir diversos looks. Sólo nos hace falta un poco de imaginación y la actitud ante el espejo para ponernos un pañuelo oncológico de la que solemos hablaros.
Tener como "fondo de armario" un par de gorros o pañuelos básicos en colores lisos nos van a facilitar mucho la labor de conseguir distintos estilos aprovechando otros pañuelos que tengamos por casa, por ejemplo. Nuestra apuesta para este fondo son los gorros oncológicos 100% de algodón orgánico certificado por GOTS, que te garantizan la máxima transpirabilidad, suavidad y comodidad, y que te van a predisponer a jugar con ellos para conseguir usarlos de un montón de formas distintas. También los gorros oncológicos tubulares cumplen a la perfección esa función.
Hoy queremos mostraros en algunas fotos el gran juego que a la hora de ir arregladas durante los tratamientos oncológicos pueden darnos las diademas tubulares, ayudándote a cambiar el estilo y el colorido con un simple gesto.
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Podéis ver como simplemente, puesto encima del pañuelo turbante sin recoger, dejando las tiras sueltas, le da un aspecto totalmente distinto, además de jugar con el contraste del colorido. Además otra de sus ventajas es que pueden ayudar a la sensación de dar volumen en la parte delantera, que suele resultar un efecto muy favorecedor. Partiendo de llevarlo puesto de la forma más sencilla, a modo de diadema encima de los gorros oncológicos podemos ir un paso más allá, y optar por una forma de colocación que aporte más volumen , como es ir "enredando" la diadema con las tiras del pañuelo de algodón orgánico, dando más volumen y terminar la colocación a modo de turbante. Es tan sencillo que incluso podemos cambiar si cambiamos de opinión a lo largo de la jornada. Y es tan sencillo que no nos haría falta ni espejo para colocarlo.
Y no aparece en las fotos, pero las diademas tubulares, pueden usarse también a modo de coletero, recogiendo a modo de coleta las puntas de los pañuelos con diadema, por ejemplo, o recogiéndo las tiras un poco más hasta que el recogido tenga el aspecto de un moño, por ejemplo. Y si quieres un aspecto , más elegante, y hasta un poco sofisticado, ideal, por ejemplo, para salir a cenar, usa la diadema con un broche bonito y verás qué cambio!!
Como verás, un complemento tan sencillo abre un buen número de posibilidades distintas para arreglarte con tus pañuelos durante la quimioterapia. Con una sencilla diadema puedes combinar y complementar tus looks y hacer más fácil arreglarte para todas las ocasiones que el verano te ponga por delante.
¡¡No te olvides de disfrutar del verano!!
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